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En esta ocasión me es grato introducirte al mundo de los programas de ejercicio físico y planes de alimentación como Propósitos de Año Nuevo
Dadas las fiestas y reuniones sociales de la temporada decembrina, generalmente la mayoría de las personas reducimos la carga de entrenamiento, que sumado a un clima más frío se conjuga en un incremento en el consumo calórico, dando como resultado un ahorro energético y una inevitable «subida de peso» (aumento en nuestras reservas de masa grasa)
Lo más recomendable es que te fijes metas tangibles en el corto, mediano y largo plazo, de acuerdo al nivel en el que te encuentras en este momento. Es difícil retomar el ejercicio físico al mismo nivel que rendías semanas o meses atrás, pues lamentablemente hay adaptaciones fisiológicas y metabólicas que se habrán visto disminuidas, si no es que perdidas...
A veces la culpabilidad nos apresura a querer recuperar el tiempo perdido en un tiempo récord, pero esto puede ocasionar sobrecargas de entrenamiento y acercarnos a alguna lesión a nivel muscular, articular o hasta fatigarnos mentalmente.
Primeramente, debes tomar en cuenta que, si hablamos de SALUD, tus requerimientos mínimos semanales de ejercicio físico son:
- Ejercicio físico aeróbico o «cardiovascular»: los puedes cubrir con al menos 3 días de 30 min. c/u,
- Ejercicio físico anaeróbico o contra resistencia «fuerza»: los cubres trabajando al menos un día por semana cada grupo muscular
Pero si no estás habituado a hacer ejercicio, te extiendo las siguientes sugerencias:
A) EJERCICIO FÍSICO
En lugar de querer despertarte 3 horas más temprano para comenzar con 2 horas de gimnasio, prueba con 30 a 40 minutos todos los días durante la primera semana, (lo más recomendable es comenzar con 30 minutos de ejercicio físico a una intensidad leve a moderada).
Para la segunda semana es factible que puedas incrementar a 45 / 60 minutos.
Y ya en la tercera semana, ejercitarte 60 a 90 minutos será más fácil y sostenible, debido a que justo 3 semanas es lo que lleva adquirir una modificación en los hábitos.
Lo más aconsejables es tener un programa de ejercicio físico diseñado especialmente para tus objetivos particulares, tomando en cuenta el punto de acondicionamiento en el que te encuentras en este momento.
B) ALIMENTACIÓN
En lo que a alimentación respecta, hay varias dietas de moda como la «keto» o el fasting (ayuno intermitente), ambos son efectivos, pues la dieta cetogénica hace que tu cuerpo utilice a sus reservas de tejido adiposo como energía y el fasting puede ayudar increíblemente contra el síndrome de resistencia a la insulina (preDiabetes), pero lo IDEAL es que sean prescritos y supervisados por un profesional de la salud (Nutriólog@) debido a que no todos los metabolismos reaccionan igual.
Ej: Para una persona que actualmente tiene gastritis, el prolongar las horas de ayuno le puede exacerbar los síntomas y aunque existen medicamentos que ayudan con dichos síntomas, lo más importante es atacar de origen los padecimientos.
Aunque la etiología o el origen de la gastritis puede ser variada, (hay quienes padecen de tipo nerviosa o medicamentosa), generalmente es causada por una bacteria que resiste el medio ácido del estómago -Helicobacter Pylori-, para éstos casos, el tratamiento con probióticos da resultados rápidos y definitivos.
A final de cuentas lo que hará la diferencia en cuanto a alimentación respecta es ¿Qué tanto puedes sostener la dieta? de modo que lo más sano es que una vez que hayas recuperado tu peso habitual, o mejor aún, una vez que llegues a tu peso meta, la clave es adoptar una fase de mantenimiento.
Ese es todo un tema a desarrollar, pero por lo pronto te invito a «no morir en el intento» llevando una estrategia simple pero eficaz en éste principio de año.
C) PROBIÓTICOS
Finalmente te invito a fortalecer tu sistema inmunológico con el simple hecho de absorber los nutrimentos presentes en tus alimentos a través de la ventaja digestiva de consumir probióticos de última generación, como los de PAVIA que vienen vivos y metabólicamente activos, que además pueden producir postbióticos tales como enzimas digestivas y algunas vitaminas, para que tu organismo te ayude a cumplir tus metas de una manera segura.
Para esta temporada te recomiendo el ¡COMBO INVERNAL! que contiene:
1 bolsa de Vitamina D3 (con S.Thermophilus, L.Bulgaricus y L.Paracasei) +
1 bolsa de Magnesio y ácido fólico (L.Rhamnosus y L.Paracasei) +
1 bolsa de A+C (L.Acidophilus y L.Rhamnosus),
¡Con 30 sobres cada una! Así obtendrás 5000UI de vitamina D3,
El 100% de tu requerimiento de Magnesio quelado (de fácil asimilación) + el 84% de tu requerimiento de ácido fólico Además de todos los antioxidantes del extracto de arándano y los beneficios del colágeno.
