Podemos encontrar probióticos en muchas presentaciones y tipos.
Como en el yogurt, pastillas, polvos, lácteos, gomitas, búlgaros...
En fin, la lista es interminable.
El problema es que no hay quien regule que realmente funcionen los probióticos.
Tomar la decisión de cual comprar puede llegar a ser complicado, por eso aquí te doy datos duros y reales a tomar en cuenta al momento de tomar la mejor opción.
¿Cuál es la mejor forma de consumirlos probióticos y con cual obtengo mayor beneficio?
Probióticos en lácteos
Los probióticos que vienen contenidos en el yogurt son probióticos desprovistos de una cubierta que los protege de la acidez del jugo gástrico por lo que la gran mayoría de ellas llega muertas al intestino y las pocas que logran sobrevivir pierden eficacia para poder adherirse y hacer su función. Además, hoy en día la mayoría de los yogurts tienen un alto contenido en azúcares o endulzantes artificiales, colorantes, conservadores y otros ingredientes nocivos para nuestra salud.
Probióticos en casa
Los probióticos como búlgaros o tibicos al momento de prepararlos y dejarlos fermentar pueden contaminarse por alguna otra bacteria patógena sin darnos cuenta y causar efectos que no son deseables. Estos probióticos no son probióticos de humano por lo que podrían ayudar a mejorar una evacuación, pero no lograrán adherirse adecuadamente a la mucosa intestinal para realizar funciones importantes en nuestro organismo.
Probióticos en pastillas, cápsulas y polvo
Los probióticos como pastillas, cápsulas y polvos son probióticos liofilizados, quiere decir que los deshidratan y en este proceso parte de los probióticos mueren. Las pastillas tienen un número muy bajo de bacterias vivas ya que la presión precisa para formar el comprimido hace que la temperatura sea superior a los 50ºC y éste es un factor que provoca la muerte de gran parte de las bacterias. Además, al momento de ingerir este tipo de probióticos liofilizados tienen que volver a hidratarse y adaptarse al medio ambiente del tracto digestivo con lo que pierden eficacia para colonizar adecuadamente y se pierden gran parte de los beneficios que un probiótico podría tener.
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¿Cuál es el mejor probiótico?
La mejor forma de garantizar que un probiótico llegue vivo al intestino y tenga una buena adhesión a la mucosa intestinal, una buena colonización del tracto digestivo y reproducción adecuada es un probiótico que no sea modificado, que esté vivo y metabólicamente activo.
Probióticos en Biogel
Estas características se encuentran en los Alimentos Funcionales de última generación en BIOGEL. Como los probióticos PAVIA. Es un pequeño sobre que contiene una gelatina que simula la mucosa del intestino humano lo que permite agregar un probiótico vivo, sin modificar, metabólicamente activo que además contiene un prebiótico (alimento de la bacteria) y un nutrimento extra que permite realizar funciones orgánicas en nuestro cuerpo.
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Esta tecnología es la última a nivel mundial que te asegura a través de estudios científicos protocolizados que llega a colonizar, equilibrar y restaurar el sistema digestivo y por consiguiente mejorar la salud de una persona.