Nuestro tubo digestivo o tracto gastrointestinal de cierta forma es nuestro «laboratorio» interno mediante el cual degradamos los alimentos que comemos para obtener los nutrimentos presentes en ellos:
- agua,
- vitaminas,
- minerales,
- aminoácidos (proteínas),
- lípidos (grasas) e
- hidratos de carbono («azúcares»)
De allí la importancia que tiene que este proceso, conocido como Nutrición. Se realice de manera completa y eficiente, PERO cuando la asimilación o absorción aún no se lleva a cabo y sale antes de tiempo, nuestras heces fecales no se han formado y son expulsadas de forma líquida o acuosa.
A esto se le conoce como diarrea y de no atenderse a tiempo puede traer consecuencias, pues al no absorber nutrimentos, podemos llegar a deshidratarnos, (la deshidratación secundaria puede causar un desequilibrio hidroelectrolítico, ya que el número de evacuaciones se incrementa) pudiendo empeorar hasta causar la muerte. De hecho, la diarrea, en tan solo cuestión de horas puede causar el fallecimiento en bebés, de allí la importancia de administrar sueros, pues justo la función principal de la última porción del intestino (intestino grueso) es la absorción de líquidos y electrolitos.
Lamentablemente a pesar de la demostrada eficacia de las soluciones de rehidratación oral en el manejo de las complicaciones por diarrea, éstas no reducen la frecuencia de movimientos intestinales, la pérdida de fluidos ni la duración de la enfermedad.
¿Cuál es la causa más frecuente de diarrea en niños?
¡El Rotavirus! que es un virus que causa los episodios de gastroenteritis más graves en niños entre los 4 meses y los 2 años de edad. El virus infecta y daña las células que recubren el intestino delgado y causa náuseas, vómitos, diarrea y fiebre en la persona infectada. El rotavirus es la causa del 50% de las hospitalizaciones por diarrea grave infantil. El virus se trasmite a través de las heces de las personas infectadas antes y después de que presenten síntomas de la enfermedad.
Probióticos para bebés con diarrea:
Desde hace más de 20 años se recomienda el uso de probióticos en el tratamiento y la prevención de la diarrea aguda.
Los probióticos son bacterias y levaduras vivas que restauran el equilibrio natural de las bacterias en el intestino cuando éste se ha visto alterado por una enfermedad o un tratamiento.
Generalmente, en bebés e incluso en niños de edad preescolar (menores de 6 años), la diarrea se presenta en un promedio de tres episodios de diarrea aguda al año, afortunadamente cada vez hay mayor información al respecto y las investigaciones apuntan que una manera de tratar más eficientemente la diarrea, es a través de la suplementación con probióticos.
Los probióticos estimulan el sistema inmunológico, compitiendo con los microorganismos patógenos por los nutrimentos y los sitios de adherencia en las células intestinales, acidificando el contenido intestinal y elaborando sustancias neutralizantes de los patógenos intestinales. La base racional para su uso es la restauración de la microbiota intestinal y así contrarrestar los agentes enteropatógenos.
-Los probióticos se adhieren a las células del intestino incrementando el «efecto barrera», ejerciendo un efecto competitivo con otras bacterias, ocupando sus lugares de unión e inhibiendo el crecimiento de enteropatógenos-
Los estudios publicados hasta el momento han demostrado que el uso de probióticos reduce en un día la duración de la diarrea, disminuye el riesgo que la diarrea se prolongue más allá de 4 días, reduciendo la probabilidad de deshidratación y disminuye los días de ingreso hospitalario.
¿Qué probióticos tomar para la diarrea?
Los lactobacilos y las bifidobacterias promueven la maduración del intestino y su integridad. Son antagónicos de patógenos y contribuyen a la modulación de la inmunidad intestinal
Algunas de las cepas de probióticos naturales que han demostrado su beneficio en la prevención y tratamiento de la diarrea aguda en niños son Lactobacillus rhamnosus, Bifidobacterium lactis, S. boulardii y L. Acidophilus.
Bacterias patógenas como E. Coli y Salmonella no pueden sobrevivir en el tracto gastrointestinal humano cuando el pH es demasiado bajo. Inhibiendo la propagación de estas bacterias patógenas, el Lactobacillus delbrueckii subespecie Bulgaricus, incrementa la función inmune.
Hay otras especies de bacterias patógenas que resisten un medio ácido (como el del estómago), tal es el caso del Helicobacter pylori, para este tipo de agentes nocivos el Streptococcus thermophillus ha demostrado controlar las diarreas causadas.
El tratamiento con antibióticos produce una reducción en la riqueza, diversidad y uniformidad microbiana del tracto gastrointestinal, para «diarreas medicamentosas» (diarreas causadas por uso de fármacos) el Lactobacillus Paracasei ha demostrado una reducción significativa en la incidencia de diarrea asociada a antibióticos (DAA)
¿Cómo tomar probióticos contra la diarrea?
Los mejores resultados del uso de probióticos para tratar la diarrea se obtienen cuando éstos son administrados de manera precoz, así su eficacia es mayor.
Los lactobacilos y las bifidobacterias pueden producir antibióticos naturales con amplio espectro de actividad, como las bacteriocinas. De esta forma acortan la duración de la diarrea. Se ha demostrado que, para ser realmente efectivos, primero han de haber colonizado el intestino, por lo que sus efectos no se notarán hasta dos o tres días después de su administración.
Por otro lado, se ha demostrado que los probióticos disminuyen y acortan la excreción de virus y bacterias, incluyendo al rotavirus (ya hay investigaciones desarrolladas incluso en otras especies).
Mi sugerencia es consumir probióticos después de los alimentos, pues es cuando podemos otorgarles mayor tiempo de acción en nuestro tracto gastrointestinal
En PAVIA encontrarás estas cepas de probióticos vivos y metabólicamente activos que te ayudarán a restaurar tu microbiota intestinal en menos de 24 horas
- Lactobacillus rhamnosus: FreeTx, A+C, OM3, Magnesio y Ácido Fólico y CRol
- Bifidobacterium lactis: CDP
- Lactobacillus Acidophilus: A+C
- Streptococcus thermophillus: FreeTx y Vitamina D3
- Lactobacillus Paracasei: CDP, Magnesio y Ácido Fólico y Vitamina D3
Te invito a que pruebes sus beneficios ¡Los amarás!