¿Cómo pueden ayudar los probióticos a prevenir enfermedades de transmisión sexual?

 ¿Cómo pueden ayudar los probióticos a prevenir enfermedades de transmisión sexual?

Introducción:



Las enfermedades de transmisión sexual (ETS) son una realidad que afecta a millones de personas en todo el mundo. A pesar de los esfuerzos para educar a la población sobre la importancia del uso del preservativo y la prevención de enfermedades, muchas personas siguen siendo vulnerables a las ETS. Sin embargo, hay una solución en la que quizás no habías contemplado: los probióticos. En este blog exploraremos cómo los probióticos pueden fortalecer tu microbiota y ayudarte a prevenir ETS.

 

¿Qué son las enfermedades de Transmisión sexual?

Las ETS son infecciones que se transmiten de una persona a otra a través del contacto sexual. Algunas de las ETS más comunes incluyen el VIH, la clamidia, la gonorrea, la sífilis y el herpes genital.

 

La mejor manera de prevenir las ETS es practicar relaciones sexuales seguras, como utilizar correctamente los preservativos y limitar el número de parejas sexuales. Además, es importante hacerse pruebas de ETS regularmente si se es sexualmente activo.

 

 

¿Qué son los probióticos?

 

Los probióticos son microorganismos vivos que se encuentran en alimentos fermentados y suplementos alimenticios. Se ha demostrado que los probióticos son beneficiosos para la salud de varias maneras. Los probióticos más comunes son las bacterias, aunque también existen algunos tipos de hongos y levaduras que se utilizan como probióticos.

  

¿Cómo pueden los probióticos ayudar a prevenir ETS?

 

  1. Restaurando la microbiota:

Se ha demostrado que los probióticos pueden mejorar la salud vaginal en las mujeres y reducir el riesgo de infecciones de transmisión sexual. La vagina es un ecosistema complejo que incluye una variedad de microorganismos. Cuando los microorganismos de la vagina están en equilibrio, se puede prevenir la colonización de bacterias dañinas y el desarrollo de infecciones.

 

La microbiota vaginal saludable, está compuesta principalmente por lactobacilos, que son bacterias beneficiosas que producen ácido láctico y ayudan a mantener un pH vaginal ácido. Un pH vaginal ácido es importante para prevenir la colonización de bacterias dañinas como la Gardnerella vaginalis, la bacteria que causa la vaginosis bacteriana y candidiasis vaginal, una infección vaginal común que puede aumentar el riesgo de contraer otras ETS.

 

Aunque los probióticos no se utilizan específicamente para prevenir las ETS, algunos estudios han sugerido que ciertos tipos de probióticos pueden tener un efecto beneficioso en la salud del tracto genital, lo que podría ayudar a reducir el riesgo de ciertas infecciones, sobre todo en mujeres que tienen un mayor riesgo de contraerlas, como aquellas que tienen parejas múltiples o que usan anticonceptivos hormonales.

 

Además, algunos estudios han sugerido que los probióticos que contienen Lactobacillus pueden ayudar a reducir el riesgo de infecciones del tracto urinario (ITU), que también pueden aumentar el riesgo de contraer ciertas ETS. Los probióticos que contienen Lactobacillus pueden ayudar a restaurar el equilibrio natural de bacterias en el tracto genital, lo que puede reducir el riesgo de infecciones.

 

  1. Reduciendo los procesos inflamatorios:

Los probióticos pueden reducir la inflamación en el cuerpo, lo que puede ayudar a prevenir las ETS.

 

Los probióticos también pueden afectar la producción de moléculas inflamatorias. Por ejemplo, algunos probióticos pueden reducir la producción de moléculas inflamatorias como el factor de necrosis tumoral alfa (TNF-α) y el interleucina-6 (IL-6), que se sabe que contribuyen a la inflamación crónica.

 

Otro mecanismo mediante el cual los probióticos pueden reducir la inflamación es mediante la producción de ácidos grasos de cadena corta (AGCC). Los AGCC son compuestos producidos por las bacterias beneficiosas en el intestino cuando fermentan la fibra dietética. Se ha demostrado que los AGCC tienen propiedades antiinflamatorias y pueden reducir la inflamación en el intestino y otros órganos.

 

La inflamación crónica en la zona genital puede aumentar el riesgo de contraer ETS, y los probióticos pueden ayudar a reducir este riesgo.

 

  1. Fortaleciendo el sistema inmunológico:

Los probióticos pueden ayudar a fortalecer el sistema inmunológico, lo que puede mejorar la capacidad del cuerpo para combatir las infecciones.

 

Los probióticos también pueden interactuar directamente con las células del sistema inmunológico en el intestino y otros órganos. Por ejemplo, algunas cepas de probióticos pueden estimular la producción de ciertos tipos de células inmunitarias que regulan la inflamación y la respuesta inmunitaria.

 

Un sistema inmunológico saludable es importante para prevenir y tratar las ETS.

 

Es importante tener en cuenta que no todos los probióticos son iguales, y que los efectos de los probióticos pueden variar según la cepa y la dosis utilizada.

 

En conclusión, aunque los probióticos no se utilizan específicamente para prevenir las ETS, algunos estudios sugieren que ciertos tipos de probióticos pueden tener un efecto benéfico en la salud del tracto genital, lo que podría ayudar a reducir el riesgo de ciertas infecciones.

 

Puedes tomar suplementos probióticos, como los de PAVIA que son simbióticos, es decir, una mezcla de diferentes cepas de probióticos, adicionada de fibra prebiótica y de diferentes nutrimentos, utilizados selectivamente por los microorganismos, confiriendo así, un beneficio a nuestra salud.  

 

Hablando de los simbióticos de PAVIA para disminuir el riesgo de contraer ETS, mi sugerencia es la siguiente:

 

  • FreeTX: Que te ayudará a restaurar tu microbiota de una manera más rápida y segura, ya que puede combatir a organismos patógenos.

 

  • Vitamina D3: con 5000 UI de vitamina D3 que fortalece tu sistema inmunológico

 

  • OM3: Que contiene aceite de salmón rico en ácidos grasos Omega 3 que ayudan en los procesos desinflamatorios

 

Sin embargo, la mejor manera de prevenir las ETS sigue siendo practicar relaciones sexuales seguras y hacerse pruebas de ETS regularmente si se es sexualmente activo.

 

Es importante recordar que los probióticos no son un sustituto del uso de preservativos u otras formas de protección contra las ETS.

 LNCA Israel Fernández Medina